jueves, 30 de abril de 2009
Cortesía del hotel La Perrrla
Esta pinta tiene el cartel del hotel La Perla al comienzo de la calle Espoz y Mina. Sin comentarios.
viernes, 10 de abril de 2009
Integrismo en la calle (un año más)
Como todos los años, y por si había duda del desembarazo con que Barcina asume, proclama y difunde los principios del nacionalcatolicismo franquista, las banderas del Ayuntamiento fueron puestas ayer jueves a media asta. Se trata de una imposición —muy propio de Barcina, por otra parte— y una falta de respeto no sólo a las personas que no están en la órbita del catolicismo, sino a cuantas, considerándose católicas, abominan de la visión del mundo que se quiere imponer desde la propia jerarquía eclesiástica y que, no por casualidad, coincide con los ideales políticos, sociales y religiosos de la extrema derecha. Para colmo, se hace imponiendo ideas de una organización que no reconoce la plena igualdad de más de la mitad de nuestra sociedad, como lo demuestra la campaña en la que está embarcada contra la modificación de la legislación sobre el aborto.
En este sentido, valdría la pena reflexionar sobre la fijación que tiene Barcina, rayana a veces en la idolatría, hacia personajes caracterizados precisamente por haber laborado denodadamente por impedir el curso de la historia y consagrar para las mujeres un puesto vicario. Me refiero, claro está, a Juan Pablo II y al conde de Rodezno. Sobre éste se ha insistido mucho en su papel en la represión franquista, pero hay otra faceta suya igualmente nefasta, porque fue el encargado de abrogar la legislación republicana sobre la igualdad de la mujer, llegándose al extremo de anular los divorcios que se habían realizado, convirtiendo a las mujeres casadas en segundas nupcias civiles en adúlteras y a sus hijos en bastardos. ¿Qué es lo que atrae a Barcina de estos personajes tan indignos?
(Una cosa más: ¿Qué se puede esperar de un país que prevé para el Santísimo Sacramento más honores militares que para el Presidente del Gobierno? La charanga y la pandereta siguen vigentes...)
En este sentido, valdría la pena reflexionar sobre la fijación que tiene Barcina, rayana a veces en la idolatría, hacia personajes caracterizados precisamente por haber laborado denodadamente por impedir el curso de la historia y consagrar para las mujeres un puesto vicario. Me refiero, claro está, a Juan Pablo II y al conde de Rodezno. Sobre éste se ha insistido mucho en su papel en la represión franquista, pero hay otra faceta suya igualmente nefasta, porque fue el encargado de abrogar la legislación republicana sobre la igualdad de la mujer, llegándose al extremo de anular los divorcios que se habían realizado, convirtiendo a las mujeres casadas en segundas nupcias civiles en adúlteras y a sus hijos en bastardos. ¿Qué es lo que atrae a Barcina de estos personajes tan indignos?
(Una cosa más: ¿Qué se puede esperar de un país que prevé para el Santísimo Sacramento más honores militares que para el Presidente del Gobierno? La charanga y la pandereta siguen vigentes...)
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jueves, 2 de abril de 2009
Emergencias imprevistas
Con permiso del excelente y muy recomendable blog PP NAVARRO.com.es.org.pp, me apropio del nuevo logo del Departamento de Urgencias Previstas del Gobierno de Navarra. Ahora, que para emergencia, Corpas. Pero ésa nadie (en el Gobierno de Navarra) ha sido capaz de preverla. Y así nos va...
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